pasión por teclear

Si hace unos posts hablábamos del Optimus Keyboard, ahora lo hacemos del primer teclado OLED que Art Lebédev ha sacado al mercado… pero tan solo cuenta con tres teclas. Se trata de un pequeño periférico que tratará de pulsar la demanda comercial que podrí­a tener el teclado completo (éste cuesta unos 100$ y hasta el 15 de Mayo no se comenzará a distribuir). Su utilidad reside en la personalización de las teclas al gusto de funciones de programas, colocar el disco preferido con su carátula, accesos directos..

A ésto añadimos una buena colección de asombrosos periféricos descendientes de la combinación QWERTY.

Por ejemplo: el Virtual Laser Keyboard. Un un haz láser que permite disponer de un teclado expandido proyectado para escribir en el pda, teléfono movil o un portátil de pequeño formato. Un teclado piramidal adaptado a la morfologí­a de la mano; un teclado guante (con su correspondiente guante-ratón); un teclado plegable en cuatro partes; uno enrollable (2); uno solar que se puede alimentar hasta con la luz de la bombilla; también retroiluminados e incluso impermeables ante caí­das de cafés!; otro para una sola mano; incluso los hay con sensores biométricos que reconocen huellas digitales!; y estos ergonómicos con tan pocas teclas son muy interesantes.

El Fingerboard previene de las lesiones del t??nel carpiano propias de las malas posturas a la hora de mecanografiar y usar el ratón (no olvidéis nunca la ergonomí­a!). ?âste, además, puede reconocer el «maltrato» al ordenador (muchas encuestas revelan este comportamiento como muy com??n) e interpretar diferentes modos de pulsar, presionar, golpear… y además, evita la suciedad acumulada detrás de las teclas (Detalle de los principales residuos encontrados bajo las teclas: Cereales (15%), Bizcocho dulce (15%), Fideos (7%), Restos vegetales (4%), Hojas (1%), Virutas de lápiz (1%), Grapas (1%), Uñas (1%), Insectos (1%), Papel de aluminio (1%), Cabellos (1%))

Otro muy interesante es el Das Keyboard! que con todas las teclas limpias de inscripciones, posibilita un rendimiento máximo de mecanografiadores, obligándoles a memorizar las posiciones del teclado y aumentando por tanto sus pulsaciones. Dicen que duplica la velocidad de aquellos usuarios «inexpertos». A todo esto, suma la peculiaridad de tener una resistencia variable seg??n la lejaní­a de las teclas. Así­, se requiere menos fuerza para pulsar aquellas teclas colocadas en los laterales que en las del centro.