Comida para pensar, pensar sobre el comer
En la documenta 12 de 2007, fue muy criticada y comentada la controvertida participación de un artista muy singular y sobretodo la manera de participar, Ferrán Adriá propuso que la experiencia de «el bulli» no puede apreciarse en otro sitio que no sea el afamado restaurante de la playa de Roses, y por lo tanto el pabellón G de la documenta se estableció allí, por primera vez fuera de Kassel. Diariamente el director de la documenta seleccionaba a 2 personas que eran invitadas a cenar al día siguiente en El Bulli, y a algunos de ellos se les pedía un feedback.
Este libro es la documentación de tal aventura, organizado como 3 platos y postre, el entrante es una reflexión acerca del significado de la comida elevado a una expresión artística, con textos de Richard Hamilton (un tertuliano frecuente de el bulli), y Adrián Searle, el principal es un interesante relato de toda la experiencia del proyecto por Marta Arzak y Josep María Pinto, y las diversas expresiones de la gente que fue invitada, algunas veces a manera de cartas, relatos, dibujos y diagramas que relataban la experiencia, en una sección denominada «retroalimentación». El tercero documenta un par de mesas redondas donde se reflexionó acerca de la idea del arte y la comida. Y de postre son una serie de documentos relacionados directamente con el bulli, unos diagramas que analizan la evolución del restaurante, los 12 platos clave, la cronología y un timeline de los últimos años de la cocina.
Sin duda un ameno e interesante libro, que hará las «delicias» no solo para los amantes de la cocina y el arte.