Después de una tortuosa burocracia, y de haber comprado el palacio de Montesquinza por 9 millones de euros y planear invertir otros 3 en la reforma para establecer la sede de su fundación y archivo.
Finalmente harto de trabas,Lord Foster del Thames ha decidido declinar el proyecto y llevársela a Londres.
La idea era albergar una parte de la colección de arte del arquitecto, así como su archivo personal. El ayuntamiento y todos los madrileños hemos perdido la oportunidad de ser la sede de esta maravillosa colección.
El decano del Colegio de Arquitectos se ha ofrecido para mediar y encontrar una posible solución.
Norman Foster renuncia a su museo en Madrid tras los escollos urbanísticos | Madrid | EL PAÍS